Una hermana muerta:
¿No merece el tiempo de un llanto?
Cuidan su cuerpo, hálito de esperanza;
La electricidad convierte su carne
de niña
en un ring.
Golpe a golpe, magullan su pecho
¿No veis que su corazón se ha marchado?
Aspiro el pestilente olor del incienso.
Yo
Aullidos de pena, aborto de complicidad
conmigo.
Nadie comprende que vive en mis venas
Papel de plata
cuchara
y aguja
metedrina pura derrochando silencio.
El humo se eleva manchando tu Cielo,
un cadáver más o menos no tiene importancia
Herr Komandante
¿Quedan vacantes en su crematorio?
Herr Komandante
¿Come cordero en su triste holocausto?
Celebración:
Si me entiendes
tienes derecho a sollozar.
(Yo)
criminal,
fue mi boca la que disminuyó el latido
y
el sonido
(Yo)
asesino,
fue mi huida la que golpeó su frágil
refugio
¿Me siento culpable?
¿Tengo razones?
Esta es la última de mi última lágrima
Siempre te quiero
jueves, 9 de julio de 2009
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